Lo conocí cuando él era adolescente, y aunque yo todavía no sabía que él era huérfano, pude suponerlo, porque a poco de empezar la conversación me contó que su sueño era tener hijos, porque deseaba y esperaba que si tenía un hijo, éste lo llegaría a querer tanto, como él necesitaba y esperaba ser querido.
Después nos perdimos de vista, pero muchas veces el azar nos reunió, y supe de sus amores contrariados. Pero sucedía algo sorprendente y era que siempre luego de, y a pesar de las rupturas, mantenía una relación tan cordial con los ex compañeros, que resultaba muy poco habitual.
Recuerdo particularmente un almuerzo de Pascua, en que llegaron a compartir la celebración, además de él, que era infaltable en las reuniones familiares: Hugo, uno de los que habían formado parte de su vida, pero con su actual pareja. Y Ariel, con el que también luego había mantenido una relación, con su nuevo compañero. Los cinco mantenían un vínculo cordial, a pesar de las historias de romances y quiebres.
Y lo más notable, fue que cuando Jose debió afrontar graves problemas de salud, que lo mantuvieron en una prolongada convalecencia, lo que lo asistieron en ese tiempo fueron Ariel y su compañero, con toda dedicación y perseverancia, hasta que superó esa etapa. También supe escuchar, que Hugo y su pareja, que habían decidido testar entre sí, cada uno a favor del otro, incluyeron otra disposición, por la cual, si ellos dos llegaran a morir juntos, el destinatario de los bienes de la pareja fuera Jose.
Creo que llegó al final con estas pruebas contundentes del afecto que había sabido generar, en estos cuatro amigos, que tuvieron con él tales muestras de consideración. ¿Muestras del cariño que tanto buscó, desde la solitaria precariedad de huérfano crónico?
Pero estaba junto a otros dos que también formaban parte de sus afectos, los más antiguos del grupo, cuando intuyó que llegaba su momento de partir. Aquellos que eran casi su familia, con que solía compartir Navidades y cumpleaños. ¿Los más cercanos? ¿Los más sentidos? Le dieron sin retacear el refugio y el cuidado tras el que Jose siempre había andado. Pareciera que el gesto del final, fue ir hacia encuentro de ellos y ellos lo acompañaron en esa despedida. La última.
17 dic 2020
Acerca de José y otras historias
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