22 dic 2020

Ambigüedades y ambivalencias

 La ambigüedad en los hijos apropiados se expresa en el abanico de una serie de  comentarios. Estos van de los que son más agradecidos a los que son más cuestionadores, tal vez a partir del vínculo  que predominara.
 
- Así se lee la adhesión preocupada, como en el caso de Evelin Vazquez y Sebastián Casado Tasca, temerosos de las consecuencias sobre sus apropiadores, nombrados por ellos como padres afectuosos y generosos.
 
- En Macarena Gelman, plantea la convicción  de que aquellos con quienes creció fueron padres preocupados por su educación y que  tuvo una dichosa infancia. Conserva los mismos sentimientos respecto de ellos, después de saberse apropiada. Y sostiene  que el inspector de policía uruguayo, en cuya casa fue criada no fue cómplice en la muerte de su madre, María Claudia García Iruretagoyena
.
- Victoria Donda se refiere como algo fuera de discusión,  como a sus apropiadores, a la pareja con la que creció,  pero guarda reservas respecto de ellos por el vínculo de afecto, aunque opina que deben ser juzgados. “Tengo buena relación con mis apropiadores, pero no hablo de ellos”. (21)
 
- Jimena Vicario plantea, cuando comenta  las versiones contradictorias: “Mi familia dice que fue apropiación y  mi madre adoptiva dice que ella no sabía nada” (22) y despliega la paradoja de ser ella quien cuida a los partícipes del conflicto, al no querer decir a quienes cree, para no lastimar a nadie.
 
- Están aquellos que pueden cuestionarse algunas de sus certidumbres con las que crecieron, cuando se plantean dudas desoladas como Marta Dillon, respecto a la historia.
 
- Por fin están, quienes como María Eugenia Sampallo Barragán, que cuestiona a la Justicia que no tomó la verdadera dimensión del robo de bebés, y en muchos casos obró con negligencia. También cuestiona la nominación de padres adoptivos, cuando no hubo trámite de adopción legal, sino inscripción fraguada de los niños como propios. De igual modo no acepta la adjudicación del nombre de padres, en tanto el supuesto amor filial en algunos casos, como el de ella, la  índole del vínculo  estuvo signado por la crueldad y el maltrato. “Socialmente no está aceptado el castigo a los apropiadores. Creo que tiene que ver con algo más general sobre quiénes son las personas más adecuadas y quiénes no para criar a los chicos”. (23)
 
La ambigüedad en los apropiadores hacia esos niños, aún en los casos en que no hubo crueldad y maltrato explícitos, reside en lo lesivo del engaño para la integridad emocional del hijo. Plantea el interrogante ya esbozado; ¿es una mentira piadosa para el niño, o es una mentira para sí mismos, pues no aceptaron su propia esterilidad?

 

21- María Egugenia Sidoti : “Hijas”, Para Ti, junio de 2008
22- Rodolfo Montes: “Historias de vida de dos jóvenes que fueron botín de guerra del Proceso”, La  Capital, 25 de marzo de 2007    
23- Victoria Guinzberg: “María Eugenia Sampallo Barragán, la primera en querellar a sus apropiadores” Pág. 12, 17 de febrero de 2008

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